Las leyes de la estupidez

Las leyes de la estupidez

15 junio, 2024 0 Por JLHA

Si clasificamos a las personas según su capacidad de aportar beneficios a su entorno y de aportar valor a sí mismas, nos podemos encontrar con cuatro tipos de personas:

  • Las que crean valor al conjunto generando beneficio también para ellos. Las podemos definir como inteligentes o colaborativas.
  • Las que crean valor colectivo, pero se perjudican a sí misma. Las podemos etiquetar como ingenuas o altruistas.
  • Las que, con su actuación, obtienen beneficio personal a costa de perjudicar al resto. Son los perversos o egoístas.
  • El tipo más peligroso es el formado por las personas que destruyen valor para todos, perjudicándose también a sí mismas. Éstas son las estúpidas. El mundo, desgraciadamente está plagado de gente estúpida, según Carlo M. Cipolla.

Este autor en su día planteó una serie de ingeniosas leyes de la estupidez humana.

  • La primera. Siempre e inevitablemente tendemos a subestimar el número de estúpidos en circulación. El número real de estúpidos es superior a nuestras percepciones, porque nos cuesta creer que alguien perjudique para dañarse a sí mismo y a otros. Y porque muchos estúpidos quedan enmascarados tras importantes cargos, posiciones o niveles educativos.
  • La segunda. La posibilidad de que una persona sea estúpida es independiente de cualquier otra característica de esa persona. La estupidez es omnipresente: aparece independientemente de género, religión, profesión, edad, condición social, cargo, preferencias políticas o nacionalidades.
  • La tercera. Un estúpido no puede evitar hacerse daño a sí mismo, causando a la vez daño a su entorno. Su tendencia natural es crear problemas.
  • La cuarta. Tendemos a desestimar las consecuencias catastróficas de relacionarnos con un estúpido. Posiblemente porque no lo detectamos hasta que es demasiado tarde.
  • La quinta. Un estúpido es mucho más peligroso que un egoísta, ya que el comportamiento de este último es, en el fondo, racional, mientras que un estúpido suele tomar decisiones absurdas e inesperadas, suicidas o auto lesivas.

Los estúpidos son imprevisibles por su falta de racionalidad. No pueden ser comprendidos. Pasan por la vida generando conflictos, sin beneficio para nadie, ni tan siquiera para ellos mismos.

La estupidez atrae más estupidez. Ésta se “clusteriza”. Dado que tanto las personas colaborativas como las ingenuas o las egoístas perciben el peligro de aliarse con estúpidos y los evitan. Esto provoca que los estúpidos tienden a trabajar con estúpidos.

Quizá las sociedades colapsan bajo el peso de los estúpidos. Lo cierto es que en la era de la inteligencia artificial abunda la estupidez natural. Lo estamos viendo por doquier al observar tanto cómo la humanidad está viviendo bárbaros conflictos, como en las absurdas decisiones que toman directivos de empresas de nombres ilustres.

En FFACT, en el apartado TO THE EXCELLENCE encontrará un interesante cuestionario de 40 preguntas sobre “el personal” que le ayudará a reflexionar sobre este importante tema.

Feliz semana a tod@s.